domingo, 14 de noviembre de 2010

Está todo pronto para el partido SUPERCLÁSICO

Los grandes ya tienen confirmados los equipos de cara al clásico. Nacional mantendrá tres delanteros y dos volantes de ataque, con el retorno de Mauricio Pereyra, y Peñarol saldrá a la cancha también con un 4-3-3, pero una zona de volantes más luchadora con el ingreso de Nicolás Domingo.
Pacheco ante Lembo se mediran hoy
Con entradas agotadas 48 horas antes del pitazo inicial, mucha expectativa, polémica en cuanto a la venta de localidades e ingreso de los hinchas a la Tribuna Olímpica, se jugará un nuevo superclásico con muchos ingredientes, que puede ser decisivo en la definición del Apertura.

Con dos entrenadores debutantes en este tipo de contiendas, los rivales de todas las horas buscarán seguir en la lucha a sabiendas que, el que pierda, quedará por fuera de toda posibilidad de ser campeón.

Hace un mes, no había dudas sobre un posible pronóstico para el clásico. Peñarol, a pesar de no estar jugando bien, cerraba los partidos y se mostraba sólido y puntero del campeonato. Por contrapartida, Nacional llegaba a los tumbos, con cambio de entrenador reciente y sin un funcionamiento colectivo aceitado ni un equipo estable.

Sin embargo, en un mes se dio vuelta la historia y el que llega con viento en la camiseta es el conjunto albo, más allá del viejo cassette que en la previa de cada choque entre bolsos y manyas emite palabras tales como "clásicos son clásicos".

Nacional

Nacional cambió la cara y mucho tuvo que ver su entrenador Juan Ramón Carrasco. El 3-0 ante Tacuarembó no puede ser medida de nada, porque fue un triunfo ante el último del certamen jugando con superioridad numérica desde el primer minuto de juego.

Lo que sí ilusiona a los hinchas tricolores es lo que vino después. El 6-1 ante River Plate fue contundente, y si bien la diferencia fue exagerada con respecto a lo que se vio en cancha, el trámite mostró a un equipo que hizo agua en el primer tiempo, pero en base a buen juego, dinámica y jugadas que salen del laboratorio de Carrasco, revirtió la situación en el segundo.

Frente a Central Español tuvo dos caras. Una muy buena atacando, con un tanto a puro tiki tiki (el primero, de Peralta) y acciones colectivas dignas del aplauso, y otra defendiendo. La zaga de Nacional ofreció muchas facilidades incluso antes de la expulsión de Raúl Ferro.

Mal parados y descoordinados a la hora de relevar al compañero, los hombres del fondo padecieron la velocidad de los delanteros palermitanos y el goalkeeper Rodrigo Muñoz fue héroe, salvando la caída de su arco en varias oportunidades con atajadas notables.

Tomando ese partido como base, Juan Ramón mantendrá nueve titulares y realizará dos modificaciones. Facundo Píriz sustituye a Ferro y Mauricio Pereyra a Robert Flores, por lo que el equipo formará con Muñoz; Cristian Núñez, Alejandro Lembo, Sebastián Coates y Mariano Pernía; Pereyra, Píriz y Matías Cabrera; Martín Cauteruccio, Santiago García y Horacio Peralta.

Flores hizó fútbol con el equipo suplente el viernes, enfrentando a la Mutual, por lo que estará en el banco de suplentes el domingo.

Cauteruccio y Peralta por los costados encarando a los laterales mirasoles, el retorno de M. Pereyra para manejar los hilos de la mitad de la cancha y la contundencia del Morro García en el área en este tipo de partidos y en lo que va del Apertura, son las armas de un equipo tricolor que tiene un leve favoritismo.

Peñarol

Peñarol viene en franco descenso y deberá mejorar demasiado lo hecho en sus últimas actuaciones. Ante Danubio, tuvo 15 minutos muy buenos en el arranque, abrió el marcador y luego aburrió a su público con pases a los costados y pelotazos largos sinsentido.

Luego llegó la derrota a manos de Liverpool, y más allá de la planificación y la polémica en cuanto a la línea de tres o de cuatro del rival, los jugadores hicieron muy poco en cancha y no tuvieron profundidad para buscar primero el descuento y luego el empate.

El equipo no jugó a nada y terminó con "el cacha" Egidio Arévalo Ríos en posición de puntero derecho y Gerardo Alcoba casi como un delantero, amontonando gente en ofensiva sin generar peligro cerca del arco rival. Por si fuera poco, la defensa tampoco ofreció garantías y en cada fecha que pasa genera más dudas.

La pálida imagen ante los negriazules no cambió una semana más tarde con Rampla, y el empate a uno de cara al clásico obligó al entrenador Manuel Keosseian a pensar en variantes. Si bien no lo ha dicho públicamente, el equipo que paró en los entrenamientos hace pensar en sólo una, pero que modifica todo un sistema y lo hace más defensivo.

El juvenil Cristian Palacios saldrá de la formación titular y lo sustituirá Nicolás Domingo, quien se ubicará en la izquierda del mediocampo y le permitirá a Alejandro Martinuccio soltarse sin responsabilidades de marca.

El equipo formará con Sebastián Sosa; Emiliano Albín, Gerardo Alcoba, Guillermo Rodríguez y Darío Rodríguez; Marcelo Sosa, Arévalo Ríos y Domingo; Fabián Estoyanoff, Antonio Pacheco y Martinuccio.

Con un 4-3-3 (que podría ser 4-3-1-2 con el Tony Pacheco retrasándose unos metros) que promete mucha lucha y no tanto juego, Peñarol basa sus ilusiones clásicas en la experiencia de algunos guerreros de 1000 batallas y en la velocidad de sus delanteros, enfrentando a una defensa lenta y pesada.

El arbitraje

Líber Prudente será el encargado de impartir justicia, secundado por Pablo Fandiño y Raúl Hartwig. Javier Bentancor será el cuarto árbitro.

El único clásico que arbitró Prudente fue el 22 de mayo de 2006, correspondiente a la 14ª fecha del Torneo Clausura. El encuentro terminó 2-2 y es recordado porque los tricolores llegaban primeros y los carboneros últimos, producto de la quita de 15 puntos por el asesinato de Héctor Da Cunha. Martín Lasarte era el entrenador de aquel conjunto bolso que terminó quedándose con ese campeonato.

En esa tarde, Alberto "Betito" Acosta abrió la cuenta a los 3' para el equipo que dirigía Mario Saralegui, pero rápidamente lo dio vuelta el tricolor con tantos de Luis Suárez y Gonzalo Castro, este último de penal. Por la misma vía empató el Betito en el primer tiempo y el tanteador no se movió, a pesar de que los aurinegros jugaron con un hombre de menos por la expulsión de Sebastián Maz a los 23'.
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Sobre el final también vió la cartulina roja Diego Jaume, pero la perlita de aquel arbitraje fue la sanción de un penal que no existió a favor de Peñarol en perjuicio de Nicolás Vigneri. Minutos después de haberlo pitado, a instancias del asistente de la América y del cuarto árbitro, Prudente dio un paso atrás y dejó sin efecto un pitazo erróneo, demostrando personalidad, dado que el atacante aurinegro había caído solo ante el achique de Jorge Bava.

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